martes, 24 de marzo de 2009


Estad alegres...


"También vosotros estáis tristes ahora, pero volveré a veros y se alegrará vuestro corazón. Y nadie os podrá quitar vuestra alegría" (jn 16, 22)



La alegría es el primer testimonio que impacta nada más conocer a una persona, del mismo modo que la trasteza.






La alegría es el mejor contagio que podemos hacer a los demás, como Isabel, que nos contagió a todos...







La persona alegre no es la que no tiene problemas en la vida, sino aquella que es capaz de afrontarlos con serenidad.





Una muestra del "virus" de la alegría: Alejandro y Nelly... pero hay más.






De la espiritualidad de San Francisco: "Guárdense los hermanos de manifestarse externamente tristes e hipócritas sombríos; manifiestense, por el contrario, gozosos en el Señor, y alegres convenientemente amables".

La alegría en la mirada es una luz que ilumina a quien la mira. Y es lo que veo en la mirada de Francisco













Angélica trabaja con alegría y hace alegre el trabajo de todos




Tati, la maternidad alegre, y que alegra










"... rogando siempre y en todas mis oraciones con alegría por todos vosotros..." Flp. 1,4

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